La relación Carbono-Nitrógeno del compost es un indicador muy útil para evaluar el desarrollo y calidad del compostaje (proceso de 45 a 120 días previo al vermicompostaje).
El valor ideal de la relación C/N varía según los autores entre 25:1 (veinticinco partes de carbono por parte de nitrógeno) y 40:1 (cuarenta partes de carbono por parte de nitrógeno).
Señales de inadecuada relación C/N
Baja relación (exceso de elementos ricos en nitrógeno)
- Temperatura elevada,
- Mal olor
- Gran presencia de gusanos, moscas y otros insectos.
Alta relación (exceso de elementos ricos en carbono)
- Fermentación lenta
- Temperatura baja
- Lentitud para obtener el compost final.
Consideraciones en la preparación de mezclas para compostaje
Para avanzar en el terreno de la confección de mezclas de residuos de alimentos para compostarlos con destino al vermicompostaje ulterior (que suele acoplarse tras un periodo de 45 a 120 días contados desde la generación, combinación, disposición y tratamiento apropiado de la MO), podemos partir de los datos expuestos, no obstante para cada mezcla se impone el ser criterioso y evaluar adecuadamente los factores que pueden afectar las relaciones y desviarlas de los valores de referencia.
Veamos algunos ejemplos.
Las aves emiten estiércoles con relaciones C/N en torno a 10/1, lo que en sentido estricto es valido para las ponedoras, mientras que las deyecciones de los pollos parrilleros suelen caer sobre cáscaras (arroz, girasol) que aportan C pudiendo llegar a valores próximos a 20/1.
Una vaca alimentada con pastura de gramíneas madura emitirá un estiércol con una relación elevada de C, mientras que la misma vaca con la dieta de un engorde a corral puede tener descensos marcados del cociente, siendo en definitiva la formulación de la dieta la que determinará las relaciones en mas o menos.
Hay dietas de engordes con prevalencia de silo de maíz donde se pica la planta entera, con todo el tallo (caña de maíz: C/N: 150/1), en franco contraste con dietas muy energéticas donde el porcentaje de fibra es muy bajo y dominan los granos (grano de maíz: C/N: aprox. 5/1).
Además, al margen de la dieta, supongamos que nuestro animal en cuestión es sacrificado en un frigorífico del que retiramos el contenido del tubo digestivo («panza»).
La relación C/N se verá muy influida por el grado de lavado que experimenta el material hasta que llega al camión que nos trae la MO, determinando en definitiva si debemos agregar fibra al material o bien incorporar alguna MO mas rica en N, como seria el caso de una «panza» muy lavada (de aspecto pajoso o «torva»).
Los residuos sólidos urbanos (RSU) presentan una composición tan variable como la distribución geográfica, la cultura, y el poder adquisitivo de las poblaciones humanas que lo generan, variando no solo el volumen de la generación (desde 0,5 kilos/dia hasta 3,0 kilos/dia) sino también la proporción relativa de los distintos componentes, que en el caso de la fracción orgánica biodegradable refleja el grado de desarrollo, siendo mas importante en las regiones de menor renta (con mas del 70% del volumen de MO biodegrable). El contenido en papel es mayor en los biodegradables de países con mas poder adquisitivo y eleva la relación C/N pudiendo llegar a sesgos extremos de 80/1 para el rubro.
En la mayoría de las regiones de Argentina no se requieren aportes importantes de fibra para compostarlos (Schuldt y de Belaustegui, 1996).
Estos ejemplos bastan para poner de manifiesto la importancia de conocer a fondo la/s corriente/s de residuos con las cuales operamos habitualmente.
Por Miguel Schuldt, Fac. Cs. Naturales y Museo (UNLP), Conicet